El paso del tiempo
Fotos de Eduard Serra
Por Getzalette Reyes
Tempus fugit es una locución latina que hace una directa referencia al veloz transcurso del tiempo. tempus fugit es también el título de la obra que la cie. toula limnaios, compañía de danza contemporánea procedente de Alemania, presentó la noche del martes 11 de octubre de 2022 como parte de la versión número 11 de PRISMA—Festival Internacional de Danza Contemporánea de Panamá.
La cie. toula limnaios fue fundada en Bruselas en 1996 por la coreógrafa e intérprete Toula Limnaios y el compositor Ralf R. Ollertz. No obstante, un año más tarde la compañía se trasladó a Berlín y de allí en adelante se han hecho acreedores de un sinnúmero de reconocimientos.
En esta pieza, siete bailarines —tres mujeres y cuatro hombres— se mueven en una unidad que fluye de forma continua, como una especie de tribu. El color terracota que predomina en sus vestimentas va a tono con las hojas secas que colmaron el recuadro del escenario dispuesto en el Teatro Ateneo, de la Ciudad del Saber.
Los intérpretes creadores Daniel Alfonso, Leonardo D’Aquino, Francesca Bedin, Laura Beschi, Priscilla Fiuza, Alessio Scandale, Hironori Sugata y Karolyna Wyrwal rodaban sobre las hojas. El sonido que provenía de sus movimientos —además del efecto por el uso de arcilla— cautivó en su intensidad dramática al concurrido público que se dio cita para disfrutar de esta pieza, cuyo concepto y coreografía está a cargo de Toula Limnaios.
La música, por su parte, constituyó una verdadera joya en esta puesta en escena. Está a cargo de Ollertz, quien, desde el área de controles del teatro, se aseguraba de que se cumpliera a cabalidad con cada detalle de los desplazamientos.
Y es que, con facilidad, el espectador puede percatarse de que la música guía a través de tempus fugit. Los sonidos son estrepitosos, eléctricos, pero luego se puede retroceder «en el tiempo» y escuchar algo más clásico. Todo ello mientras los intérpretes o bien acatan las normas que imponen las «sociedades actuales» o, por el contrario, simplemente deciden «rebelarse».
Uno de los apartados más emotivos tiene que ver con la incorporación de un muñeco bebé a la pieza, por sus múltiples significados. El muñeco es puesto a imitar lo que hace el resto del grupo. Es arrastrado por el suelo, vuela, pasa de mano en mano. ¡Una agonía! Luego son los intérpretes quienes siguen, en una especie de trance, los movimientos articulados por la criatura, como si esta fuera una fuerza tutelar que los controlara en una danza colindante con el desquicio.
Según lo ha explicado la coreógrafa e intérprete Toula Limnaios en un video colgado en el sitio web de esta compañía de danza, este muñeco muestra los ciclos del ser humano. Sin embargo, al espectador también pudiera evocar a las familias, la violencia física, el estado de indefensión de la niñez o bien a la soledad.
El desenlace de la pieza muestra con creces los motivos por los cuales tempus fugit es una de las obras de danza más exitosas de la cie. toula limnaios, en gira mundial desde 2016.
FICHA TÉCNICA. Pulsar la imagen:
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